No deja de asombrar a la entidad científica la facultad que tiene la Inteligencia Artificial para elaborar predicciones y ayudar de un modo u otro a la humanidad. Los avances que en la medicina se están sucediendo no dejan de impresionar.
Os mostramos cómo la Inteligencia Artificial ha podido aventajar a los científicos a la hora de descubrir que el coronavirus de la ciudad de Wuhan era una nueva cepa y de qué modo se iba a transmitir por el mundo.
Un método con algoritmos de IA situado en Canadá fue quien descubrió la aparición de la nueva cepa y valió para que los científicos chinos lograsen dar la voz de alarma. Gracias a ella, se habrían demorado más días en localizar y en haber puesto en funcionamiento el protocolo que posteriormente ha concluido recluyendo la ciudad de Wuhan.
Los hechos sucedieron a finales de año, cuando el comité de Salud de Municipal de Wuhan alertó de la aparición de una fuerte neumonía de naturaleza desconocida. Se hablaba de casi una treintena de vendedores del mercado de Wuhan que compartían una enfermedad parecida. El último día del año fue la OMS la representante de comunicar al mundo de la aparición de esta cepa desconocida.
Sin embargo, no se localizaba en el país asiático el individuo que iba a detectar qué era lo que estaba ocurriendo en Wuhan. Se ubicaba en la ciudad de Toronto, y no era una persona, sino un software que pertenece a una Startup llamada Bluedot. La compañía canadiense se acaba de hacer famosa por su hazaña. Sin embargo, el poder de esta herramienta no es nueva, ya que en 2014 ya fue capaz de predecir con seis meses de anticipación la aparición del virus Zika que causó la temida alerta sanitaria.
Propiedades de la IA de la empresa canadiense.
Las fórmulas de este programa desarrollado en 2014 [puede estudiar en tiempo real millones de datos.
La IA ha sido preparada a través de del Maching Learning o aprendizaje automático. Es un programa informático completo capaz de interpretar el lenguaje natural. Su fin es ser más rápida en analizar lo que está sucediendo en el planeta que la capacidad de transmisión del propio virus. Pero no sufras, si te consuela… el software contaba con algo más de datos que nosotros.
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